... de la gloria en las flores

 

 Oda a la inmortalidad

Aunque el resplandor que
en otro tiempo fue tan brillante
hoy esté por siempre oculto a mis miradas.

Aunque mis ojos ya no
puedan ver ese puro destello
Que en mi juventud me deslumbraba

Aunque nada pueda hacer
volver la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos
porque la belleza subsiste siempre en el recuerdo.

En aquella primera
simpatía que habiendo
sido una vez,
habrá de ser por siempre
en los consoladores pensamientos
que brotaron del humano sufrimiento,
y en la fe que mira a través de la
muerte.

Gracias al corazón humano,
por el cual vivimos,
gracias a sus ternuras, a sus
alegrías y a sus temores, la flor más humilde al florecer,
puede inspirarme idéas que, a menudo,
se muestran demasiado profundas
para las lágrimas.

 William Wordsworth  Inglaterra (1870-1850)

 

Como puede suponer quien se acerque hasta aquí, el martes pasado vi la película.

Una más entre tantas pellículas inmortales que nos está regalando La2 los martes desde hace un tiempo. Buena ocasión para repetir con algunas (El Apartamento nunca me cansa) o, como yo en este caso, ver otras esperando desde hace mucho una ocasión. 

Y el martes pasado se presentó la oportunidad de ver Esplendor en la hierba y escuchar este poema me pareció  una buena razón para regresar aquí tras tanto tiempo. 

 

 

Corte de la película Esplendor en la hierba en el que se recita "Oda a la inmortalidad"

 

Mil gracias y un abrazo a quienes,  a pesar de mis repetidas y prolongadas ausencias, pasen por aquí. 

Salud y suerte